sábado, 26 de diciembre de 2009

El brujo

Atended: Elroy Workman es una persona fuera de lo común. Todos habláis de él, hacéis comentarios sobre su práctica de la magia negra, y lo odiáis y teméis tanto que siempre habéis querido expulsarlo de la aldea, pero nunca lo habéis hecho por falta de valor.

Decís cosas terribles de la magia negra, y todas son tan falsas como que Elroy es un brujo. Elroy tan solo es un hombre diferente al resto de vosotros, y eso no le convierte ni en un hechicero ni en un monstruo. Solo por decidir ser distinto, le habéis acusado de todos los males de la aldea, y todo ha sido por envidia. No soportáis que Elroy haya decidido romper con lo preestablecido mientras que vosotros continuáis teniendo una existencia vacía.

Podíais haber aprendido mucho de él, pero en lugar de seguir su ejemplo y desarrollaros tal y como sois, os aferráis a viejos prejuicios sin sentido y creais calumnias y acusaciones falsas.

Sabéis que esta noche Elroy morirá. Vuestras acusaciones han llegado a oídos de la Inquisición, y al caer el sol, un hombre bueno será ejecutado. Elroy no es un monstruo, es una víctima, y vosotros, sois sus asesinos.


Diego Escudero

8 comentarios:

Esther dijo...

Nunca mejor dicho. En esas épocas remotas, debería ser todo terrible. Eran más brutos... Bueno, aunque supongo que hoy en día, tb seremos brutos pero, de otra manera. Aunque a veces me parece que este mundo se precipite hacia un vacío, un caos interminable, cada vez con más brutalidad. Distintas formas de brutalidad.

La magia negra me da un poco de yuyu. Me recordaste a que una vez, cuando me interesaban más esas cosas, un amigo de entonces, me hizo comprarme un libro de magia negra. Yo no lo quería pero, él sí y me dijo que lo comprara por él y me dio pena. Así que lo compré. Los hechizos y conjuros de ese libro eran rarísimos, con palabras extrañísimas sacadas de no sé dónde, supongo que de alguna lengua antigua. Eran algo así como latín o algo parecido, no sé... Había uno que me pareció horroroso de cómo matar a una persona; otro para hacerse invisible... todo extrañísimo. Nunca lo he usado ni lo pienso hacer pero, me alucinaba. Era muy fuerte sobre todo ese de matar. No sé por dónde andará. Una vez, sí que practiqué magia blanca y extrañamente se cumplieron algunos hechizos pero, supongo que sería la casualidad. Y una vez vi a Rappel explicando un hechizo muy extraño con una puerta en la tele y lo vi ridículo.

El personaje de tu cuento tenía por lo menos algo en lo que creer. Quizás todos necesitemos creer en algo,es algo así como un alimento. Las personas que a veces se distinguen por un motivo u otro sobre otras cabezas, no siempre lo tienen fácil.

Muy bien escrito, narrado, montado... :) Me gustó.

Felices fiestas y saluditos de exbruja :)

Sara dijo...

Muchas veces la ignorancia es la peor sentencia.



Felices fiestas ;)

AnniDarkSweet dijo...

La triste realidad es precisamente que juzgamos, y no siempre con coherencia. ¿Pruebas? No siempre las hay.Pero...

Es lo que hay.Es lo que toca.

feliz salida y entrada de año =) un saludito

Gritarle al viento dijo...

Que gran relato!

Y si muchas veces la acusaciones, se vuelven prueba contundente para la ejecucion de alguien que tal vez no se lo merecia.

Te sigo leyendo!

Paula dijo...

Un final tremendo. Saludos!

atenea dijo...

Si es que parece que o somos todos iguales o, por envidia o por ignorancia, el que es diferente lo paga caro... buena reflexión! Besos!

Isabel dijo...

Ya sabes lo que opino, pero recuerda no olvides seguir escribiendo :-)

Un beso

PD:(échale un ojo a mi blog a ver si te gusta la nueva imagen)

Suseya ediciones dijo...

Cuantas veces lo desconocido y lo nuevo se encuentra con el odio y el miedo.

Desde aqui humildemente te pido que vuelvas a escribir.

Un gran abrazo del bardo