sábado, 26 de septiembre de 2009

Te odio

Nunca te dije que te odio. No te aguanto ni a ti ni a tu estúpido hijo gordinflón.

Cuando murió mi esposa, me sentí sólo hasta que te conocí. No me importó que estuvieras divorciada y tuvieras un hijo. Eras encantadora.

Después de casarnos, te convertiste en un ser insoportable. Desordenabas mis libros, me estropeabas el ordenador cada dos por tres, los días que había partido, traías a las zorras de tus amigas, y os adueñabais de la tele del salón, si me compraba ropa que no te gustaba, la tirabas a la basura, y para rematar, ponías la música a toda hostia a la hora de la siesta. Sobre tu hijo ¿qué puedo decir? Es un mocazos de ocho años incapaz de atarse sólo los zapatos, que no hace más que molestar. El puto niño no habla, vocea, deja todo pringoso con sus dedos llenos de porquería, sus trastos están tirados por todas partes, y por si fuera poco, me despierta los domingos por la mañana, para que le lleve a unas clases de música que es incapaz de aprovechar.

Estoy convencido de que estas deseando que nos divorciemos, seguro que el juez te concede la casa que he pagado con mi sueldo. Por desgracia para ti eso no va a pasar. La toxina que hay en tu organismo te matará en unos segundos. Divertido ¿verdad? Pues eso no es nada, más divertido va a ser cuando juegue con tu hijito, y le arranque la cabeza.


Diego Escudero

8 comentarios:

Laura Luna dijo...

Mucha mala leche, aunque yo le habría puesto más. Y mucho sarcasmo.
Kisses,
Mun

Yandros dijo...

Madre de dios que duro jajajaja
Me ha gustado esa crudeza, libre de tapujos y de tabúes
Un saludo!

Rebeca Gonzalo dijo...

Me imagino al niño despiezado y la verdad en lugar de provocarme repulsa me he reído ante tal idea. Mucho sarcasmo en el texto. ¡Me ha encantado!

Serwan dijo...

Relato peliagudo por rozar la violencia de genero ¿a quién se maltrata más aquí?

Emma Grandes dijo...

Madre mía! Cuánta crudeza! Me gusta la forma tan directa que has utilizado. Cada frase es una bofetada.
Un saludo!

Anónimo dijo...

¿Era necesario arrancarle la cabeza? jajaja, la verdad es que los niños pueden ser muy pringosos, jajaja

Ya en serio, y dejando de lado las clases de música un domingo por la mañana, el relato es bueno. Me hiciste reir, de puro subrealismo, no he podido evitarlo. Es genial.

Deprisa dijo...

¿otro Escudero por aquí? Esto suena y se lee bien ;)

Fer (deprisa)

Suseya ediciones dijo...

Eso debe ser de familia XDDD
En serio tienes talento tio.

un saludo.